*Alto
precio de productos obliga a preparar cenas menos abundantes
Marcelo
Zanella
Los
mercados tradicionales y las tiendas de autoservicio lucen abarrotadas durante
las compras de última hora en vísperas navideñas, cientos de amas de casa hacen
“coco” tratando de ajustar las compras de la cena navideña a su presupuesto
pues los ingredientes cuestan hasta tres veces más de lo que costaban en la
navidad del 2008.
El
número promedio de integrantes de una familia es de 4 personas, según datos del
INEGI, por lo que preparar una cena navideña para ese núcleo familiar puede
llegar a costar como mínimo 1 mil 900 pesos, según estimaciones de la propia
Procuraduría Federal del Consumidor.
En
un recorrido realizado por los principales centros de comercio de la ciudad, se
pudo constatar que los precios de los mercados tradicionales son más elevados
que los precios de las tiendas de autoservicio. Es el caso de la carne molida,
utilizada para preparar diversas cenas navideñas como el albondigón, que en
tiendas de la zona centro cuesta cerca de 85 pesos el kilo, comparado con los
48 pesos en promedio que cuesta en tiendas de autoservicio. Una porción de ese
tamaño apenas y alcanza para la mitad de la familia.
La
percepción de las amas de casa es que esta navidad será de las más caras que
hayan tenido. "Todo está carísimo, algunas cosas no subieron tanto, pero
hay otras que se pasan de caras. yo creo que este año vamos a dejar de hacer el
pavo o la pierna y prepararemos algo más sencillo, porque cada vez nos alcanza
para menos", dijo Hilaria Martínez, quien realizaba sus compras en el
mercado Constitución.
En
ese contexto, se encontró que el pavo se puede encontrar a 54 pesos el kilo,
pero considerando que un pavo completo puede pesar hasta 7 kilos, el precio
total se eleva a casi los 400 pesos, aunado al relleno que se basa
principalmente en carnes rojas, cuyo kilogramo puede costar hasta 80 pesos.
Otros
productos típicos como el bacalao se encuentra hasta los 249 pesos el kilo,
mientras que otros productos del mar también utilizados en esta temporada se
encuentran a 189 pesos el kilo, como el caso del salmón y algunos otros
pescados que se venden a 179 pesos el kilogramo.
Cosa
similar ocurre con el camarón y el calamar, que respectivamente, tienen precios
que oscilan entre los 119 y 129 pesos el kilo.
"Estamos
comprando lo mismo y más o menos estamos gastando igual, pero hay algunos
productos que en vez de llevarnos 2 kilos, no estamos llevando un kilo y
medio", señaló Eduviges Suarez, cliente del mercado Gonzalo N. Santos.
El
café y el refresco han sustituido al tradicional ponche navideño, pues con el
precio de las frutas, resulta muy caro realizar la típica bebida. La manzana por
ejemplo que tenía un precio de 28 pesos el kilo, ahora se encuentra en 34
pesos; la guayaba costaba entre 15 y 20 pesos el kilo, pero ahora cuesta 25
pesos. Las frutas más económicas son el tejocote que vale 15 pesos, el rollito
de caña de 10 pesos —que tiene alrededor de siete trozos de vara dulce— y la
jícama de 12 pesos el kilo. Es así como las amas de casa prefieren adquirir los
refrescos en su presentación de 2 litros por 25 pesos, que gastar en un ponche
navideño.
Y
a la cuenta no se ha sumado el costo de los panes y baguettes para acompañar,
quizás un vinito para brindar, dulces o postres para complementar la cena, y el
costo posiblemente ya supere los 2 mil pesos.
Tomando
en cuenta que de acuerdo a la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), 8.8 millones de familias mexicanas –-un
aproximado de 32 millones de personas— viven con uno o dos salarios mínimos,
esta navidad una buena parte de este país tendrá que conformarse con lo que se
alcance a comprar, para lo cual las amas de casa usaran su ingenio para estirar
el gasto.